¿Se ha sentido alguna vez poco preparado para marcar una diferencia significativa para Dios? Los sentimientos de incompetencia e inferioridad espiritual roban a innumerables creyentes el gozo y la eficacia que Dios quiere para sus vidas. El Dr. Stanley expone, a la luz de la verdad bíblica, cómo el Espíritu Santo ha capacitado de forma única a cada creyente para un ministerio y un servicio con propósito.
Bosquejo del Sermón
Nos gusta recibir presentes, pero es mucho más agradable cuando somos nosotros los que lo damos (Hch 20.35). En el reino de Dios, los dones espirituales son otorgados con el propósito de que ayudemos a otros. Esta semana, el Dr. Stanley nos habla de los dones espirituales y del papel que tiene el Espíritu Santo para darlos y desarrollarlos.
Pasaje clave: 1 Corintios 12.1-11
Lecturas de apoyo: Hechos 2.4, 38; Romanos 12.4-8; 1 Corintios 3.10-15; 12.14-21, 28-30; 14.12; 2 Corintios 5.10; Efesios 2.8, 9; Efesios 4.11-13; 1 Pedro 4.10
Cuando Dios le llama para hacer algo, ¿siente que no está capacitado o rechaza dicho llamado por considerar que no está debidamente equipado?
Si rechazamos el llamado del Señor porque no nos sentimos capacitados significa que nos perdemos…
Bendiciones aquí en la Tierra.
Recompensas en el Cielo.
El gozo que proviene de servir a Dios.
El Espíritu Santo…
Nos capacita para que hagamos lo que Dios nos ha pedido realizar (Hch 2.4).
Es dado a cada creyente en Cristo como un regalo (Hch 2.38), y como un sello (Ef 4.30).
► “No podemos poner a Dios en ningún tipo de caja. Él es el creador de todas las cajas”.
Los dones del Espíritu (1 Co 12.1-11)…
Son otorgados a los cristianos para que realicen la obra de Dios (1 Co 12.8-10).
Incluye funciones designadas por Dios (1 Co 12.28).
No siempre vienen por medio de las acciones de una persona (1 Co 12.28).
Pertenecen al Espíritu, para que sean dados de acuerdo con su voluntad (1 Co 12.29, 30).
Tienen que ser usados en algún ministerio (1 Co 12.7; Ro 12.4-8; Ef 4.11, 12).
► “Todos se benefician cuando hacemos uso de nuestros dones espirituales”.
Todo creyente en Cristo recibe al menos un don espiritual (1 P 4.10), y todos los dones son dados con el propósito de…
Capacitar a los cristianos para que se ayuden unos a otros (Ef 4.12, 13).
Equiparnos para que alentemos a otros (1 Co 12.14-21).
Dios nos llama, nos da dones, y asume la responsabilidad de llevar a cabo la obra mediante nosotros. Sin embargo, nosotros debemos…
Estar dispuestos a emplear nuestros dones en la obra de Dios.
Comprender que un día compareceremos ante el tribunal de Cristo, para ser juzgados y recibir recompensas (2 Co 5.10).
Edificar nuestra vida en Cristo como nuestro fundamento (1 Co 3.10, 11).
Edificar bien, no haciendo uso de malos materiales que no podrán sostenerse ante el fuego del juicio de Dios (1 Co 3.12-15).
Estar activos en la obra del Señor (1 Co 14.12), y desarrollar nuestros talentos en el ministerio al que nos llame.
Después de ver el sermón
La mejor manera para reconocer nuestros dones espirituales es al participar en la obra de Dios. ¡Pídale discernimiento al Espíritu Santo y obedézcalo! Entréguese a Él, y comenzará a reconocer los dones espirituales con los que el Señor le ha bendecido.
Lea Efesios 2.10 cada vez que se sienta incapaz. Escriba este versículo en un lugar visible, como recordatorio de que es “hechura” de Dios, y de que ha sido capacitado para realizar “buenas obras…que Él preparó de antemano”.