Saltar al contenido principal
Sermón de TV

El Espíritu Santo: Nuestra ayuda en la oración

El Espíritu Santo es nuestro divino Ayudador en la oración, que intercede por nosotros cuando no encontramos las palabras adecuadas.

Predicado por primera vez el 4 de marzo de 1990
2 de agosto de 2025

¿Le resulta difícil encontrar las palabras adecuadas cuando ora, o se pregunta si Dios le escucha en realidad? La frustración en la oración hace que muchos creyentes se sientan desconectados de Dios e inadecuados en su caminar con Él. En este mensaje, el Dr. Stanley revela cómo el Espíritu Santo actúa como nuestro Ayudante divino en la oración, al interceder cuando no sabemos qué decir y alineando nuestro corazón con la voluntad de Dios.

Bosquejo del Sermón

Si en alguna ocasión ha perdido la motivación para orar porque se ha sentido confundido, o porque tan solo no tenía idea por de dónde comenzar, existe una solución. No tiene por qué descubrirlo por sí solo. En el mensaje de esta semana, el Dr. Stanley reflexiona en cómo el Espíritu Santo nos ayuda a hablar con Dios con toda confianza.

Pasaje clave:  Romanos 8.26, 27

Lecturas de apoyo:  Mateo 6.31, 32; Juan 16.12, 13; Hebreos 4.13

Si comprendemos lo que en realidad ocurre mientras oramos, lo haríamos más seguido (y lo más seguro es que veríamos más resultados).

► “Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo están activos cada vez que oramos”.

El Espíritu Santo es…

  • Nuestra ayuda práctica. Nos auxilia cuando tenemos dificultad para orar (Ro 8.26, 27).

  • Nuestra ayuda personal. Mora en nosotros para siempre, y así nos fortalece con su presencia para que hagamos la voluntad de Dios (Ro 8.26).

  • Nuestra ayuda siempre disponible. Obra en nuestra vida en todo momento, pues nunca está “ocupado” para nosotros.

  • Nuestra ayuda idónea. Es parte de la Trinidad, y nunca estaremos incomunicados.

► “Dios sabe que nos frustramos y que a veces no sabemos cómo pedir”.

¿Cómo el Espíritu Santo nos ayuda a orar?

  • Entiende nuestras debilidades (Ro 8.26).

  • Conoce nuestras necesidades y deseos (Mt 6.31, 32; He 4.13).

  • Revela la voluntad del Padre.

► “Cada vez que lea un pasaje de la Biblia y sienta que fue escrito para usted, es el Espíritu obrando en su vida”.

  • Nos da guía y dirección por medio de la Palabra de Dios, mientras testifica a nuestro espíritu.

  • El Espíritu Santo nos abre los ojos a la verdad y nos revela la mente de Dios acerca de nuestras preocupaciones (Jn 16.12, 13).

  • Conoce nuestro corazón e intercede a nuestro favor (Ro 8.26, 27).

► “El Espíritu Santo nos conoce a la perfección y nos comprende”.

Después de ver el sermón

  • Considere esto: el Espíritu Santo le conoce a cabalidad. ¿Qué le hace sentir esta gran verdad? ¿Siente alivio, incertidumbre, gozo, o quizás vergüenza? Sin importar lo que ha sentido, no se preocupe. Toma tiempo desarrollar una relación con el Espíritu, y Él siempre está disponible para ayudarle a crecer.

  • Cada día durante la semana que se aproxima, intente mantener un diario de oración. Dedique tiempo para buscar la dirección del Espíritu de Dios, o para compartirle su necesidad. Póngale fecha a todo lo que escriba, y anote todo lo que le revele, ya sea un pasaje de la Biblia o alguna palabra de sabiduría. Esto es algo que podrá revisar más adelante, para ver las evidencias de su obra en su vida.

Explorar Otros Sermones