Muchas personas se identifican como cristianos, pero solo quienes han aceptado al Señor Jesucristo como Salvador pueden llamarse “creyentes”. Menos aún pueden considerarse verdaderos “seguidores” del Señor.
¿Es usted creyente o seguidor? Confiar en Jesucristo es fundamental, pero solo el primer paso. Nuestro propósito es seguirlo toda la vida, honrándolo con acciones y palabras, y crecer en sabiduría bíblica.
La vida de un seguidor se caracteriza por la obediencia. De hecho, Jesucristo definió a los verdaderos cristianos como aquellos que demuestran su amor por Él guardando su palabra (Jn 14.23). Eso no significa que los seguidores de Cristo no cometan errores; sin embargo, su anhelo es permanecer fieles al plan del Señor. Además, buscan proclamarlo en tiempos de bendición y también en medio de la calamidad, y están dispuestos a ir incluso a donde no desean, si es allí donde Dios los guía.
Los seguidores buscan al Señor porque desean una relación más profunda con Él. No solo esperan la eternidad en el cielo, sino que reconocen que su reino ya está presente y pueden disfrutarlo aquí y ahora, a medida que caminan por la senda de justicia que Él ha trazado para ellos.
BIBLIA EN UN AÑO: MARCOS 3-5